Las almendras tienen una rica historia no solo como ingrediente culinario, sino también como medicina. En la Edad Media, las almendras eran llamadas "el rey de las nueces", la investigación moderna ha demostrado que las almendras son verdaderamente únicas en sus propiedades nutricionales y medicinales.
Tipos de almendras
La almendra es una fruta de hueso de un almendro decorativo de gran belleza. Actualmente, se cultivan dos tipos de almendras: dulce (Prunus amygdalus dulcis) y amarga (Prunus amygdalus amara). Los granos de almendra dulce son comestibles tanto crudos como procesados, tienen un aroma dulce y un sabor agradable. Las almendras amargas contienen alrededor del 2-3% del glucósido amigdalina, que, en presencia de agua y ciertas enzimas (también contenidas en el tracto digestivo humano), libera ácido cianhídrico mortal. Solo 6-7 nucleolos de almendras amargas crudas son suficientes para envenenar a un adulto. Al mismo tiempo, las almendras amargas procesadas térmicamente se vuelven inofensivas. Las almendras amargas en su forma cruda tienen un sabor amargo astringente. Es más pequeño y tiene una punta más afilada. Con fines medicinales, las almendras dulces se consumen crudas, se prepara leche de almendras y se exprime el aceite esencial de ambos tipos de almendras.
Para hacer leche de almendras, muele 6 cucharadas de almendras y 500 ml de agua hervida filtrada en una licuadora. Colar a través de un colador fino o un filtro de gasa y guardar en el frigorífico.
Valor nutricional de las almendras
Las almendras crudas contienen 22 gramos de proteína y 20 gramos de carbohidratos por cada 100 gramos de producto. La proteína está formada por aminoácidos esenciales, es un elemento estructural de las células, necesario para la producción de ácidos nucleicos y glóbulos rojos. Los carbohidratos son una fuente de energía. La misma dosis de almendras contiene 12 gramos de fibra dietética, que puede ayudar a reducir los niveles de colesterol, prevenir el estreñimiento y reducir el apetito. Almendras y fuente de ácidos monoinsaturados, zinc, potasio, hierro, vitaminas del grupo B, vitaminas A y E, selenio, manganeso y magnesio.
Las almendras contienen aminoácidos esenciales, que son tan deficientes en los vegetarianos que rechazan la proteína animal.
Las almendras contienen gluten, una propiedad que hace que la harina de almendras sea adecuada para hornear pasteles y galletas. Los deliciosos postres de almendras pueden ser consumidos incluso por personas con alergias a los alimentos de trigo y enfermedades como la enfermedad celíaca.
Las personas con intolerancia a la lactosa pueden beber leche de almendras.
Beneficios de las almendras para el sistema digestivo
Las almendras son útiles para tratar el estreñimiento crónico. Si come de 10 a 15 amígdalas antes de acostarse, por la mañana no tendrá problemas con las heces. Si el estreñimiento le molesta de forma irregular, entonces el aceite de almendras vendrá al rescate. Solo 7 gramos de aceite esencial de almendras dulces, diluidos en un vaso de leche, te harán sentir una mejora significativa muy pronto.
Las almendras y el sistema cardiovascular
El alto contenido de grasas monoinsaturadas que se encuentra en las almendras es beneficioso para el sistema cardiovascular, reduciendo el riesgo de diversas enfermedades en un 30%. El magnesio, también presente en las almendras, expande las paredes de las venas y arterias, facilitando el flujo de sangre y, en consecuencia, el oxígeno y los nutrientes a todos los órganos en general y al músculo cardíaco en particular. Los estudios han demostrado que los niveles bajos de magnesio no solo provocan ataques cardíacos, sino que también contribuyen al daño de los radicales libres en el músculo cardíaco. Los antioxidantes contenidos en las almendras son buenos para el corazón, los vasos sanguíneos, reducen el riesgo de diabetes y algunas otras enfermedades crónicas.
Las almendras ayudan a hacer frente a la anemia, ya que contienen aproximadamente 1,5 mg de cobre por cada 100 gramos de nueces. El cobre, junto con el hierro y las vitaminas, sirve como catalizador para la síntesis de hemoglobina.
Beneficios para la salud de las almendras para la piel, el cabello y las uñas
Las almendras alivian la irritación en las afecciones de la piel, especialmente el eccema y la psoriasis, así como el enrojecimiento, las erupciones y la picazón. Masajear tu rostro regularmente con aceite de almendras te ayudará a reducir las arrugas o prevenir la formación temprana. El mismo remedio es eficaz para combatir el acné. El aceite de almendras aplicado a la piel alrededor de los ojos eliminará los círculos negros debajo. Frotando aceite de almendras en el cuero cabelludo evitarás la caída del cabello, la caspa y mantendrás un color intenso por más tiempo, evitando las canas prematuras.
Las almendras tomadas internamente, a través del alfa-tokferol (una forma de vitamina E), nutrirán el cabello y la piel, dejando la primera brillante y sedosa y la segunda brillante y suave.
Otros beneficios para la salud de las almendras
La emulsión de almendras es útil para enfermedades bronquiales, ronquera y tos. El triptófano que se encuentra en las almendras promueve la salud del cerebro, la buena memoria y reduce los niveles de estrés. Las almendras contienen riboflavina y L-carnitina, nutrientes que aumentan la actividad cerebral, incluida la reducción del riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. El alto contenido de vitaminas B, en particular ácido fólico, hace que las almendras sean útiles para las mujeres embarazadas, ya que es este ácido el que ayuda a reducir la posibilidad de defectos de nacimiento en los recién nacidos.
Contraindicaciones
Las almendras contienen oxalatos, por lo que no se recomiendan para personas con enfermedad renal o de la vesícula biliar. Si es alérgico al aceite de almendras, su piel puede comenzar a hincharse, así que pruebe el producto en un área pequeña cerca del dorso de su mano antes de usarlo.